El Reglamento dictaminado forma parte de las modificaciones que, sobre participación ciudadana y sus órganos de representación vigentes, se han de acometer por el Ayuntamiento para adaptarlos a la modificación introducida por la Ley 57/2003, del 16 de diciembre, de Medidas para la Modernización del Gobierno Local, si bien en la Ley 7/1985, se establece el carácter de naturaleza orgánica de la regulación de los órganos complementarios y de los procedimientos de participación ciudadana.
Este Reglamento busca tres objetivos: adaptarlo a la nueva realidad colectiva ciudadana, profundizar en la extensión de la participación ciudadana como fórmula más democrática del desarrollo de la gestión y crear nuevos niveles y formas de estructurar la participación para una mayor eficacia en su aplicación.